El actor protagoniza esta función basada en textos clásicos sobre asnos con la dramaturgia de Álvaro Tato y la dirección de Yayo Cáceres. En escena, un burro sabio sin nombre, de seis mil años de edad, en un recorrido por sus aventuras, desventuras y peripecias a lo largo de de la Grecia y la Roma clásicas, la Edad Media festiva y carnavalesca, el Siglo de Oro español e inglés, la Ilustración y la Modernidad. La música en directo le acompaña en su “aventura”… Esta producción de Ay Teatro es llevada a escena también por Fran García, Manuel Lavandera e Iballa Rodríguez.
-“En una finca vacía, un burro atado a una estaca le cuenta su vida a su sombra mientras se acerca un incendio forestal. Burro ha vivido siglos y ha visto y sabe todo lo que se ha escrito y cantado sobre ellos, los burros. Entonces habla y nos cuenta y canta… Y su sombra le atiende y contesta a veces. Así pasan sus días bucólicos pero cargados de sabiduría y dolor”… ¿Qué más le podemos contar a nuestros lectores sobre la historia de “Burro”?
Es un texto hermosísimo, lleno de emoción y de humor. Es la visión de la Historia de la Humanidad a través de los ojos de un burrito. Es la Historia de la relación de los humanos con los animales. Al hilo de ese relato hay momentos muy divertidos y hay otros muy emocionantes, muy bonitos y, además, hay música en directo.
-Interpretar a un burro, ¿Es o no un reto interpretativo para ti?, ¿Por qué?
Siempre es un reto interpretar a cualquier ser humano pero si, además, no es un ser humano, tiene lógicamente más complicación. No hacemos una imitación física de un burro pero sí hay una evocación de sus movimientos, de su presencia, de lo que nos comunica. Pero este burro es muy humano. Sus sentimientos y emociones se parecen mucho a las nuestras. Este personaje es un regalo. Es un placer interpretar un texto tan hermoso como éste y estar tan bien acompañado.
-Comenta Álvaro Tato que la función “es un canto al burro en primera persona y en clave de comedia amarga a través de su voz lúcida y empecinada, a veces sarcástica, a menudo adorable… y también un atronador rebuzno contra la injusticia y la violencia. Una reflexión, al fin y al cabo, sobre el ser humano, capaz de la gracia y del horror, de la más atroz crueldad y la más sublime ternura…”.
El texto tiene una primera parte de lamento de este animal por cómo se les ha tratado a lo largo de la Historia pero después pasa a ser una denuncia o una reivindicación también. Se habla de la evolución del ser humano, de lo poco que ha cambiado nuestra relación con los animales. Que nos sigue costando mucho respetar a los animales como se merecen.
-¿Qué dos frases de los personajes que interpretas elegirías?
– “¿Qué importa que yo viva un día más si ya me he olvidado de ser libre”. La dice el burrito narrador.
– “¡Arre pollinos!. ¡Alzad los orejones que va a empezar la fábula”.
-Este monólogo cuenta con fragmentos de textos de Miguel de Cervantes, William Shakespeare, Ovidio, Apuleyo, Charles Perrault o Juan Ramón Jiménez, entre otros autores. ¿Cómo se desarrolla la transición en escena entre unos y otros textos ?
Los textos están cronológicamente ordenados a través de un viaje por la Historia de la Literatura y de la Humanidad. Empezamos en la etapa primitiva, “antes de que esos monos raros conquistaran el Mundo a palos”, como dice el burrito, y vamos desde el Imperio Romano, la Edad Media, el Siglo de Oro, el Siglo de las Luces, la Revolución Industrial… hasta el Mundo actual…
-¿Por qué crees que esta función emocionará a los espectadores?
Porque cualquiera que sienta un mínimo amor por los animales, cualquiera que haya tenido una mascota o cualquier persona que tenga una mínima sensibilidad, estoy seguro que se va a emocionar con nuestra Historia. Creo que puede ser para ellos/as una tarde de Teatro inolvidable.
-¿Qué destacarías de la labor de Yayo Cáceres como director de la función?
Es un director extraordinario. Es una función muy difícil de dirigir. Ha hecho un trabajo fabuloso. Es un Director muy inteligente, tiene muy claro lo que quiere y es un placer trabajar con él.
-El guitarrista Manuel Lavandera y dos jóvenes actores-músicos (Fran García e Iballa Rodríguez) te acompañan en el escenario. ¿Qué tipo de música hay en el montaje?
La música está compuesta por Yayo Cáceres. Es original y preciosa. Hace un recorrido por las músicas del Mundo. Hay música española, hay un tango. Ha querido hacer una semblanza de música de distintos países. De gira.