El musical producido entre Broadway, Italia y Let’s Go Company está en Madrid gracias a la colaboración de Antonio Banderas, socio y amigo de Andrew Lloyd Webber, que se ha propuesto trasladar las obras del británico y otros autores del teatro musical internacional a España. Es la primera vez que Webber autoriza una adaptación de uno de sus espectáculos y, según cuentan los responsables del montaje, quedó tan encantado con el resultado después de asistir al estreno italiano en Trieste que probablemente no será la última.

El reparto incluye a varias de las más destacadas figuras del teatro musical español. A Erik, el Fantasma, lo encarna Gerónimo Rauch, argentino afincado hace muchos años en nuestro país, y que ya interpretó el papel en el West End londinense. Completan el trío de protagonistas Talía del Val (Christine) y Guido Balzaretti (Raoul) y el resto de los papeles principales los encarnan Marta Pineda, Francisco Ortiz, Omar Calicchio, Laura Martín, Silvia Luchetti y Enrique del Portal.

«El fantasma de la ópera» que podrá verse en Madrid se presenta con una escenografía barroca cuidada hasta el más mínimo detalle, con los fondos pintados a mano por el artista italiano Rinaldo Rinaldi. El espectáculo nace como una suerte de «flashback», que se inicia en una subasta y donde más tarde el espectador es trasladado desde el escenario del teatro a los sótanos donde se oculta el fantasma, siguiendo la trama clásica que en 2004 Joel Schumacher llevó al cine con Gerard Butler como protagonista.

La propuesta escenográfica es más compacta que la estrenada por primera vez en Broadway en 1986. La orquesta pasa de 27 a 14 músicos. Y la acción se desarrolla en un escenario giratorio que permite cambiar rápidamente de escena y trasladar al espectador desde la oficina de los nuevos propietarios del teatro hasta los camerinos en cuestión de segundos; e incluso mantener dos escenas contemporáneamente convirtiendo al espectador en cómplice. UMusic Hotel Teatro Albéniz.