Charlamos con Malena Alterio y David Lorente, los protagonistas de esta comedia. Han sido dirigidos por Daniel Veronese, que también es autor del texto junto a Matías del Federico.
-¿Cómo es tu personaje?
MALENA ALTERIO: Mi personaje es Elisa. Es una mujer trabajadora, madre y esposa, templada en cuanto a su forma de ser y en cuanto a sus razonamientos. Con las ideas bastante claras, aparentemente.
DAVID LORENTE: Al iniciarse la función Nicolás tiene una crisis encima de “no te menees”. Una de esas crisis en todos los sentidos que un hombre más o menos cincuentón no puede abarcar como ser humano. Pero va evolucionando a medida que avanza la función.
-Dos parejas amigas se encuentran a cenar todos los jueves desde hace más de doce años. Nicolás y Elisa ya han llegado al restaurante, pero sus amigos no…Los minutos pasan y ese misterioso e imprevisto retraso abre entre ellos preocupantes e imprevistas reflexiones…
MALENA: Es una historia que te hace pensar y que cualquiera que ha tenido una relación se va a sentir reflejado en ella. También si no se ha tenido una relación de pareja la obra es extrapolable a todo tipo de relaciones. El tema de la comparación o de sentirte que no estás en el lugar que te corresponde está a la orden del día y más ahora con las redes sociales y todo lo que conllevan.
-La obra reflexiona sobre cómo nos sentimos valorados por nuestros allegados, sobre nuestras inseguridades y percepciones, e indaga en el papel que ocupamos en la sociedad… ¿sobre qué otros temas nos habla?
DAVID: Yo diría que indaga en el papel que creemos que ocupamos en la sociedad respecto a la visión y al sentimiento que tenemos de nosotros mismos. A partir de cómo se sienta uno consigo mismo es cómo nos enfrentamos a lo demás.
-¿Cuáles son las principales preguntas que se hacen los dos personajes?
MALENA: Creo que hablan de las relaciones, del lugar que tenemos y el que deseamos tener. Y también se preguntan sobre las relaciones con tu pareja y con el mundo que te rodea.
-Una de las escenas preferidas de tu personaje tiene lugar cuando…
MALENA: No sé cuál elegir. Todas son reseñables. Me quedo con el viaje del personaje, no con un momento concreto.
DAVID: Me encanta el comienzo… los tiempos de espera, en silencio. Darle realismo a una situación tan teatral.
-Termina esta frase: “Una vez que la función empieza uno es dueño de…”
MALENA: …….. tus actos….pero a veces se te puede desbocar obviamente…¡Hay peligro!.
DAVID: …ese comienzo y nada más. A partir de ahí todo es compartir, no adueñarse.
-¿Qué le aporta el Teatro a tu vida?
DAVID: La oportunidad de contar historias a otros.
MALENA: Todo, todo. Es mi forma de estar en el mundo y mi forma de pagar mis gastos. La forma de entenderme y la forma de vivir.
-¿Qué destacarías de Daniel Veronese como Director?
MALENA: Su amor por el teatro, por los actores y su amor por formar grupos que a la larga se hacen indestructibles. Le conocí en “Los hijos se han dormido”, una adaptación suya de “La Gaviota” de Chéjov, y la verdad que me quedé con ganas de más. Han pasado muchos años desde que coincidimos y ese buen gusto y buen sabor de boca que se me quedó la primera vez lo he vuelto a tener ahora. Me encanta la sencillez, pero también la hondura con la que trabaja. Y la amabilidad con la que nos trata.
DAVID: El gran dominio que tiene del hecho teatral. De cómo hay que contar las cosas en el escenario. Con nosotros se ha centrado en que lo hagamos bien y contemos bien la historia.
-¿Describe brevemente la escenografía, la iluminación y el vestuario de esta obra?
MALENA: Va todo acorde con la historia que estamos contando. Elisa Sanz como escenógrafa y Pedro Yagüe como iluminador han hecho un gran trabajo que acompaña a lo que acontece y a la idea de Daniel Veronese. Creo que Daniel intenta huir de todo lo que sea armado de alguna forma. Si fuera por él a lo mejor estaríamos en una sala vacía y con nuestra propia ropa de calle, pero el pack viene completo.
Es una coproducción del Teatro Español, Producciones Off y Vania. De gira.