Una historia de amor en la que sus protagonistas van a descubrir los signos necesarios para romperse el corazón el uno al otro, al tiempo que averiguan que hay historias de amor que llegan para ayudarte a descubrir quién eres.
Lucho es sordo pero Jaime tiene mucho que contarle. Es invierno, y los dos acaban de conocerse. El primer flirteo en un centro comercial ha desembocado en un paseo por las calles de Madrid, donde sus pasos les encaminan hacia el piso de Jaime. Es evidente que se gustan, y Jaime se esfuerza por vocalizar mucho para que Lucho descifre sus labios.
Lucho le enseña a Jaime lengua de signos y se convierte en presencia habitual en la casa, con permiso de Pote, su compañero de piso. Entre palabras y signos se enamoran a trompicones, mientras resquebrajan sus corazas, sus mundos chocan y Jaime indaga en la misteriosa intimidad de Lucho, que incluye a su hermana Juana, también sorda. Y, entre tanto, Jaime progresa con la lengua de signos gracias a los ejercicios prácticos que le plantea Lucho. “Hoy vamos a fingir que lo dejamos, te voy a enseñar a romper en lengua de signos”, le propone. Pero ¿cuáles son los signos que necesitas conocer para romper el corazón de alguien? Quizás mejor no aprender a expresar ciertos sentimientos, porque las historias de amor que pintaban ideales pueden empezar a tambalearse con cada nuevo descubrimiento.
Con Carlos Soroa, Enrique Cervantes, Emma Vallejo y Jonás Torres dirigidos por Edgar Córcoles. Hasta el 17 de Noviembre. Teatro Quique San Francisco.