Magüi Mira ha dirigido a Luisa Martín y a Olivia Molina en esta producción de Pentación Espectáculos basada en el texto de Ignacio Amestoy. Hablamos con la directora y sus dos protagonistas.
MAGÜI MIRA
-Comentas en la presentación de la función que ésta “Nos habla de dos mujeres que se enfrentan con el poder en sus manos. Buscan la verdad y encuentran la gran mentira. Dos supervivientes de hoy, que buscan el oxígeno imprescindible para recuperar una dignidad perdida…”, ¿De qué otros temas nos habla?
De la vida. Del verbo vivir. De la vida que controlamos y manipulamos y de la vida que nos sorprende. Hablamos de que el poder económico facilita la manipulación, crea los engaños necesarios para mantenerse, abre corruptelas si son necesarias para atrapar el deseo obsceno de enriquecerse sin límites. Produce desigualdad. Produce control obsesivo. Eso no es vida. Y hablamos de como la razón y la inteligencia pueden anular la violencia. Y también hablamos del valor que todavía tiene la apariencia en una sociedad consumista. Y, sobre todo, hablamos de que se puede navegar entre estos mares sucios y revueltos con ética y compromiso, aunque la que navegue sea una mujer.
-¿Qué tipo de relación mantienen Victoria Burton y María García?
Cruzan un bosque oscuro, se pierden, se enfrentan, pero son capaces de entenderse, de descubrir donde está cada una. Y de decirse adiós… Ese “No” tan difícil de pronunciar y de aceptar.
-¿Por qué estas dos mujeres viven en una sociedad “no diseñada para ellas”?
Como todas las mujeres. No es novedad. Estamos abriendo un paisaje nuevo, rompiendo viejos esquemas de sometimiento. Nos han adiestrado y educado para ser una comunidad de servicio, por género, por ser mujeres. Ese diseño está caduco. No es sostenible. Nadie con razón y corazón lo quiere. Seguimos buscando nuestro espacio en este paisaje de vida, ahora del año 2.024, el que nos pertenece. Y espero que seamos sujetos de nuestra historia. La historia de todos.
-¿Qué simbolizan los tacones en esta función?
Un absurdo. Una ingenuidad que duele. Nos creemos que esos centímetros de falsa altura que nos dan los tacones nos convierten en personas más poderosas. Y sabemos cómo nos pueden llegar a doler los pies…y el alma, si no somos capaces de abandonar esa pequeña y gran falacia. Otra cosa es el juego con ese objeto fetiche y bello.
-También comentas que “Son dos grandes mujeres desnudando, despellejando o reinventando el poder de una clase privilegiada. Dos mujeres solas. Siempre han estado solas…”, ¿A qué se debe esa soledad?
Se debe a algo real que sigue sucediendo cuando una mujer es agredida, violada, despreciada…Es asombroso, pero su entorno social no la apoya y rescata de manera natural y contundente. Se queda sola.
-¿Qué destacarías de Luisa Martín y de Olivia Molina como actrices?
Cada día de ensayo se ha convertido en trabajo duro y gozoso. Mi admiración por ellas es radical. Espero que el público las disfrute tanto como yo.
-¿Por qué es necesario seguir llevando a escena textos como éste de Ignacio Amestoy?
Es un regalo poder trabajar con un texto brillante y eficaz de un autor vivo. Contemporáneo. Ignacio Amestoy bebe la vida que sucede y la convierte en arte.
-Háblanos un poco de cómo van a ser los elementos escenográficos…
El trabajo de Curt Allen y Leticia Gañán es un fuerte potenciador de emociones, es la belleza, y se suma a la luz de José Manuel Guerra siempre llena de poesía, al vestuario de Gabriela Salaverri que es pura inspiración, y al espacio sonoro tan vibrante de Santi.
LUISA MARTÍN
-Descríbenos a tu personaje…
Victoria es una mujer muy inteligente, poderosa, elegante, segura de sí misma, accionista mayoritaria y presidenta de la empresa que fundó su bisabuelo que ahora es una multinacional. No lo ha tenido fácil, pero aquí está.
-¿Qué tipo de relación mantiene con el otro personaje femenino?
Saben mucho la una de la otra y hay admiración mutua, pero ésta es la primera vez que se encuentran…
-¿Con qué frases de tu personaje te quedarías?
Hay muchas frases que me encantan en la función, tanto de mi personaje como del de mi compañera, pero tal vez me quedaría con: “Sólo hay una respuesta para la pregunta de la esfinge”.
-Comenta Magüi Mira en la presentación de la función que ésta “Nos habla de dos mujeres que se enfrentan con el poder en sus manos. Buscan la verdad y encuentran la gran mentira. Dos supervivientes de hoy, que buscan el oxígeno imprescindible para recuperar una dignidad perdida…”, ¿Estás de acuerdo?, ¿Qué añadirías al respecto?
Completamente de acuerdo con Magüi, como no podía ser de otra manera. Tan sólo añadiría que “hay que acabar con el poder que destruye la dignidad”.
-¿Cuáles son los principales temas de los que nos habla esta función?
De la verdad, la soledad, la sociedad, la dignidad, la familia, el poder, la mentira, el daño, el dolor, el silencio.
-¿Por qué es necesario llevar a escena este texto de Ignacio Amestoy?
Porque con un exquisito lenguaje habla de la vida y de sus miserias. Hay funciones y textos que no te dejan en paz, te persiguen en la calle, en el sueño, en la ducha… y no se rinden. Te enfrentan a ti misma en cada palabra. Estamos disfrutando y deseamos que el público disfrute con nosotras.
-¿Qué destacarías de Magüi Mira como Directora?, ¿En qué se ha centrado con vosotras?
Es sabia y es actriz, disfruta y hace disfrutar del proceso con humor y con sentido común. Nada se da por supuesto y busca la verdad. Y la consigue. Cada ensayo ha sido una aventura.
OLIVIA MOLINA
-¿Cómo es María, tu personaje?
Es una mujer íntegra, meticulosa. Es una persona que cree en los pilares fundamentales de una profesión tan dura y gratificante como es la abogacía: el encuentro de la verdad y el ejercer la justicia. Cree tanto en ellos que los aplica a su vida real. Es alguien que busca sin parar… y en un momento dado se da cuenta de que se está buscando a sí misma.
-¿Qué tipo de relación mantiene con Victoria, el otro personaje femenino?
Es muy interesante lo que se establece con el otro personaje. Es un encuentro a vida o muerte. Ambas son un espejo en el que la otra puede mirarse, y al verse reflejadas se dan cuenta de lo que no son.
-Según tu opinión, ¿qué nos narra esta función?
Es la historia de dos mujeres que se encuentran por primera vez pero que se llevan buscando por diferentes motivos toda la vida. Lo que sucede al verse y conocerse es un viaje crudo, hermoso y sanador. Es la historia de dos seres humanos haciéndose “las grandes preguntas”, y esas preguntas son puertas que, si se cruzan, ya nada volverá a ser lo mismo. Si será mejor o peor… eso deberá elegirlo cada espectador.
-¿Con qué frase de tu personaje te quedarías?
Una de las frases que más me gustan de mi personaje (una de ellas, porque atraviesa lugares muy interesantes) es tan clara y concreta como: “Defiendo mi libertad, esa es mi fuerza”. Creo que refleja el alma o el motor de este personaje, la claridad y el derecho a decidir sobre la vida de cada uno y de cada una.
-¿Cuáles son los principales temas de los que nos habla “Malditos tacones”?
Este texto habla de la valentía y del precio de saber la verdad; de nombrar los secretos que se guardan en una familia para poder romper el círculo y poder ser libre de las lealtades y del hecho de que el origen de cada uno no determina su futuro.
-¿Qué destacarías de la labor de Magüi Mira con vosotras?
Magüi es fascinante. Es una fuente de vida, de inteligencia, de inspiración… Es tan completa y libre que seguir sus propuestas, sus ideas y sus búsquedas en este montaje ha sido un crecimiento, un regalo para siempre. Retratos de Javier Naval. Hasta el 20 de Octubre. Teatro Bellas Artes.